Los nuevos dominios ¿burbuja o realidad?
Categorías: Domain Protect / Dominios / ICANN / Marca / Marcas / Propiedad Industrial
Los nuevos dominios son ya una realidad. Durante este principio de año 2014, aunque en el blog no hayamos hecho un seguimiento con detenimiento, se ha producido la liberalización de los dominios de primer nivel (en su momento ya comentamos sobre la discusión de si las empresas deben gestionar TLDs genéricos y justo ahora conocemos que la ICANN ha rechazado la petición de Amazon para el dominio .amazon). En cuanto a números se refiere, desde Domisfera están realizando un seguimento y por ahora nos encontramos con 800.000 dominios nuevos registrados con las nuevas extensiones y nos encontramos en el top 10 con las siguientes:
1. .guru (58.271)
2. .club (51.530)
3. .berlin (48.035)
4. .photography (36.056)
5. .在线 (31.473)
6. .email (30.330)
7. .link (28.803)
8. .today (24.767)
9. .tips (22.715)
10. .company (19.115)
Hemos de recordar que en estas nuevas extensiones nos encontramos con terminaciones tanto genéricas (.club, .bike)), como de ciudades (.berlin, .nyc) o para potenciar la cultura, idiomas como (.eus o .gal). Seguramente en estos primeros registros se esté generando cierta burbuja o mejor dicho cierto ataque de registro masivo de dominios por personas que, en su momento, pudieron oir hablar de la liberalización de los .com y su éxito, además, por supuesto de registros de empresas para proteger sus marcas. Es casi generalizado el pensamiento que quien esté pensando en la especulación con este tipo de dominios se va a dar un gran «batacazo» y que, los dominios de «siempre», los .com o los territoriales como .es, .it, etc. seguirán siendo los más valorados, porque son los que más conocen los usuarios y más valoran las marcas. ¿cuál es mi opinión? (partiendo de la base que yo pensaba que .guru iba a ser un fracaso y veo que se encuentra entre los dominios más registrados…)
1º Un problema para las marcas. Problema que tiene una doble vertiente, por una parte de las grandes empresas que habrán postulado o tendrán que hacerlo para proteger su marca como dominio (para ello la ICANN creó su propio sistema y su trademark clearinghouse) y problema para la protección de su marca en cada uno de los nuevos TLDs. También es cierto que se han establecido periodos sunrise y cada TLD también ha establecido ciertos sistemas o incluso precios diferentes, pero no son más que mayores quebraderos de cabeza (y de dinero) para las marcas y complicación de la gestión y vigilancia activa de sus signos distintivos.
2º Un propio problema para la ICANN, está claro que muchos de las nuevas extensiones no funcionarán ¿qué sucederá entonces? seguramente otros registries o la propia ICANN se tendrán que hacer cargo de esas terminaciones puesto que entiendo no porán dejar sin servicio a empresas que hayan podido registrar y apostar por una terminación como marca. Las ganancias que puedan estar teniendo ahora pueden ser un problema de gestión en el futuro.
3º Inseguridad para el usuario. Realmente los dominios están perdiendo su importancia, de hecho la apuesta por algunos navegadores de casi no mostrar ya la url, o que para muchos usuarios la única barra conocida es la del buscador, hace que el dominio pierda su valor y su poder de distinción. No olvidemos que los dominios nacieron como forma nemonística para no tener que acordarnos de la dirección numérica de una máquina. Sin embargo este desconocimiento de las nuevas terminaciones puede generar inseguridad o por el contrario creencia de seguridad que quien le está solicitando información/ofreciendo un servicio/producto es ciertamente quien el piensa (estoy pensando en temas de phishing, estafas, ataques estilo man in the middle, etc.)
4º Oportunidad para generar una marca diferente. Con todo lo anterior muy presente, y sobre todo el desconocimiento del usuario, sin embargo apra quien esté desarrollando un nuevo negocio el juego del TLD con el nombre puede generar innumerables posibilidades de marcas (además de ayudar en el posicionamiento por ejemplo: iurismatica.abogado), es lo que se denomina domainhacking (sobre todo para hacer dominios más cortos) y que tenemos grandes ejemplos como «ilike.it», o «justdo.it». Jugar con terminología más dominios puede aportar una grandísima posibildiad de generar marca fuera de las habituales «.com». Por cierto, en esto del domainhacking la OEPM y oficinas de registro tendrán que poner más cuidado porque en muchísimas ocasiones se ha «quitado» el valor distintivo de la terminación para no protegerla, cuando ahora realmente puede ser el valor diferencial de la marca escogida. Veremos su implementación