Los sistemas de repescas de nombres de dominio – «backorders» – Primera Parte
publicado el 3 septiembre 2007
¿Qué es un backorder?
Si vamos a la definición que aparece en la wikipedia, nos encontramos que un «backorder» de un dominio de Internet es una solicitud de registro justo cuando éste queda libre para poder ser registrado nuevamente. Sin embargo, considero que a esta definición le faltan algunas de las características que los agentes registradores o empresas que se dedican al mundo de los dominios les aplican y a las que intentaremos dar luz.
El mundo de los backorders (como casi todo lo que ocurre en Internet) apareció en EEUU cuando los grandes agentes registradores se dieron cuenta del potencial que tenían al poder comprobar con antelación que dominios iban a caducar.
¿Cómo funcionan estos sistemas?
Antes de nada conviene aclarar, para los no iniciados en la materia, algunos de los secretos (o más bien realidades que no se comentan al público en general) sobre la caducidad de los dominios. Es interesante conocer que, una vez que un dominio no ha sido renovado en la fecha que nos indica el Whois, aún y todo opera un periodo de redención o de gracia (que puede oscilar según el tipo de dominio que nos encontremos) durante el cúal sólo el titular puede «repescar» el nombre de dominio «perdido» y seguir disfrutando de su registro. Como es de suponer, este sistema funciona para evitar los posibles errores, distracciones o cualquier circunstancia que haya producido la falta de renovación de un dominio y las desagradables consecuencias que para el titular puede acarrear dicho error, como pueden ser la desaparición de la web, falta de funcionamiento del correo electrónico, etc.
Los agentes se percataron que era muy fácil para ellos saber con exactitud, puesto que cuentan con herramientas e información otorgada por las entidades de asignación de nombres de dominio (ICANN, nic.es, denic, etc.), qué dominios iban a caducar y el momento exacto de su caducidad, una vez pasado ese periodo de gracia que se otorga al titular del nombre de dominio. Además, con el boom del negocio «domainer«, dichas empresas vieron una gran oportunidad de obtener mayores beneficios por la venta de nombres de dominio que iban a caducar poniendo a disposición de los domainers esta información, conocedores que (como en todo negocio) la posibilidad de adelantarse a los competidores es un camino seguro al éxito. De esta forma, los agentes crearon herramientas para poner a disposición de los domainers esta información sobre los dominios que probablemente en fecha próxima iban a quedar libres de registro para que pudiesen adelantarse y registrarlos en el momento mismo de su «liberalización». Los agentes utilizaron básicamente 2 sistemas:
– Subastas. Un sistema de subastas (normalmente sólo para los domainers a los que no accedía el público en general) donde el agente diariamente publicaba los dominios que iban a caducar, pudiendo los domainers (además de hacer los estudios pertinentes sobre la viabilidad de los dominios que posiblemente se liberaban) pujar por los dominios que les interesase para hacerse con ellos una vez liberado el dominio. (Esta también es una buena forma de, además, poder conocer y calibrar realmente el valor de los nombres de dominio).
– Ventas directas. Quizá un sistema más cerrado para los grandes domainers donde (nos podemos imaginar que por grandes cifras) los agentes registradores llegaban acuerdos con domainers para ser ellos y solo ellos los conocedores de la información y venderselos directamente.
¿Conoces alguna herramienta de backoders?
En España estos sistemas están surgiendo gracias a la «liberalización» (entre comillada puesto que seguimos esperando una verdadera liberalización de los nombres de dominio, pero esto sería tema para otro largo comentario) de los nombres de dominio bajo el código correspondiente a España «.es». En la actulidad existen algunas herramientas como www.backorders.es. Si queréis conocer más en profundidad este mundo os recomiendo que os paséis por allí.
Actualización: Hostalia a través de Domiteca también cuenta con una herramienta de backorders:
En próximas entradas del blog hablaremos sobre cómo afecta la normativa a los backorders y si existen resoluciones sobre esta materia.